Protagonistas y espectadores en el Día Nacional de Prevención de Desastres y Atención a Emergencias

Un par de horas antes el Centro de Operaciones de Emergencia había declarado la Alerta Amarilla en el país ante el paso de la Tormenta Tropical Erika. Domingo y el resto de vecinos ganaderos de la comuni-dad de Las Terreras, en Azua, saben ahora que cuando la alerta es amarilla deben llevar su ganado al refugio de vacas que construyeron en noviembre de 2013, con el apoyo de Oxfam y la Unión Europea como parte de un proyecto de respuesta ante emergencias. También saben que después de dar refu-gio a su ganado, si la alerta se ha convertido en roja, deben inmediatamente dirigirse a un albergue junto al resto de su familia y vecinos y vecinas. Domingo Figuereo, al igual que sus compañeros gana-deros de Las Terreras, y al igual que otros muchos del resto del país, perdió sus vacas y por consecuen-cia su fuente de ingresos, tras el paso del Huracán George en 1998, y luego las perdió nuevamente en el 2007, con las Tormentas Olga y Noel, y más recientemente en el 2012, con el Huracán Sandy.

El Refugio de Ganado en Emergencias que construyeron los vecinos de Las Terreras hace casi dos años es un ejemplo de cómo la población puede organizarse y estar preparados para reducir los riesgos ante desastres. El Huracán George, que azotó a la República Dominicana en 1998, dejó 347 personas falleci-das, más de 975,000 afectados, 1,981 millones de dólares en pérdidas económicas y una difícil y larguí-sima recuperación que la población dominicana sigue recordando. Hoy es 22 de septiembre y el país vuelve a recordar a George en el Día Nacional de Prevención de Desastres y Atención a Emergencias, como un punto de inflexión que mostró la necesidad vital de tener comunidades y estados más y mejor preparados ante el impacto de amenazas como son huracanes, terremotos y epidemias entre otros.

Según el “Atlas de Exposición Económica a Riesgos Naturales”, un índice compilado por Maplecroft publicado en el 2012, República Dominicana se encuentra en la lista de los diez países del mundo que enfrentan la mayor debilidad financiera ante desastres y es propensa al impacto de amenazas natura-les (huracanes, lluvias intensas, sequías, etc.) que comprometen su desarrollo sostenible. Desde 2010 las inundaciones han aislado a cientos de miles de personas, mientras las sequías están afectando a millones de personas en las principales ciudades del país como Santo Domingo y Santiago.

En este contexto la Dirección General de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea y la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastre, con la colaboración de la Comisión Nacional de Emergencia de República Dominicana, entre otros, han organizado el Taller Re-gional de Planificación de Reducción de Riesgos de Desastres para el Caribe, que busca desarrollar pla-nes de acción regionales para reducir los riesgos relacionados con amenazas naturales (huracanes, sequías, terremotos, epidemias, entre otros).

De forma paralela al taller, el cual muestra la importancia de la coordinación entre todos los actores humanitarios, a escala nacional y regional, tanto gubernamentales como no gubernamentales, las co-munidades de San Cristóbal participarán hoy en el 1er Ciclo de Cine de Reducción de Riesgos de Desastres. Todas las personas que irán al cine conocen perfectamente lo que significa una inundación o las consecuencias de la sequía. Sin embargo, para la mayoría de ellas será la primera vez que no se-rán los protagonistas del desastre, sino que lo verán en pantalla grande desde el otro lado, el de los espectadores.

El 1er Ciclo de Cine de Reducción de Riesgos de Desastres está organizado por el consorcio de organi-zaciones Oxfam- Plan International- Hábitat para la Humanidad en el marco del proyecto “Fortale-ciendo la resiliencia urbana a través de la protección humanitaria, la gestión de centros colectivos y la comunicación en San Cristóbal”, el cual cuenta con el apoyo de la Dirección General de Ayuda Huma-nitaria y Protección Civil de la Comisión Europea.

El proyecto, que se implementa en los municipios de San Cristóbal y Cambita, va a beneficiar a 54,549 personas y 78 organizaciones, entre las que se incluyen la Comisión Nacional de Emergencia (CNE), la Defensa Civil, el Centro de Operaciones de Emergencia (COE), la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), Ministerio de Educación (MINERD), Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillado (INAPA), la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU), el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) y el Consejo Nacional de la Niñez (CONANI), entre otras.

Ana Paola van Dalen es la asesora de comunicación del proyecto de gestión de riesgo de desastre “Ponte Alerta San Cristóbal” el cual implementan Oxfam-Plan International y Hábitat para la Humanidad con el apoyo de la Unión Europea.